¿Qué es la violencia vicaria?
Este tipo de violencia se caracteriza por el uso de los hijos e hijas como herramientas para causar sufrimiento emocional a las mujeres. Generalmente se da cuando la relación de pareja termina y el agresor no acepta la ruptura. En los casos más extremos, la violencia vicaria puede implicar el asesinato o daño físico a los menores, con el único fin de infligir un dolor irreparable a la madre.
Más allá de los hijos
Aunque los hijos suelen ser las principales víctimas indirectas, esta forma de violencia también puede dirigirse hacia otros seres queridos de la mujer, como familiares o amigos cercanos. En algunos casos, el agresor instrumentaliza a los niños para que agredan emocionalmente a sus madres, utilizando insultos u otras formas de maltrato psicológico, lo que también constituye un delito.
Una forma de violencia que demanda atención urgente
La violencia vicaria no solo causa un daño emocional profundo a las mujeres, sino que también pone en riesgo el desarrollo físico y psicológico de los niños involucrados. A pesar de que los casos denunciados en Paraguay son pocos en comparación con otros tipos de violencia, la gravedad de sus consecuencias hace que esta problemática sea una prioridad para las autoridades y la sociedad.
Es crucial promover políticas de prevención y brindar apoyo integral a las víctimas para romper este ciclo de violencia que afecta a las mujeres y sus familias.
Feminicidios y sus consecuencias
Este año, 27 mujeres fueron asesinadas en casos de feminicidio, dejando un saldo de 58 niños huérfanos. La mayoría de los agresores eran parejas o exparejas, aunque también se registraron casos donde los feminicidas eran padres, exyernos o personas cercanas al entorno de las víctimas.
Regiones con mayor incidencia
Los departamentos con más casos de feminicidio en 2024 son Central, Alto Paraná, Amambay y Canindeyú, lo que muestra que esta problemática afecta tanto a áreas urbanas como rurales.