“La menopausia es el momento de la vida de la mujer en el que cesa la menstruación y se suele dar entre los 45 y 55 años”, empezó explicando Selba Montanía, nutricionista ortomolecular.
Según la misma, en esta etapa de la vida de toda mujer, los ovarios dejan de producir las hormonas, estrógeno y progesterona; y al bajar los estrogénos se experimentan cambios a nivel metabólico, lo que lleva a la acumulación de grasa en diferentes zonas del cuerpo.
“Se tiene también una disminución de la densidad mineral ósea y menor masa muscular”, agregó, además de mencionar que “una alimentación adecuada será fundamental para disminuir el impacto de todos estos cambios que ocurren”.
Verduras, hortalizas y frutas
Precisamente, en cuanto a la dieta recomendada para esta etapa de la vida, Montanía explicó que “será importantísimo incluir verduras, hortalizas y frutas, que son fuente de fibra, fitonutrientes y antioxidantes. También el consumo adecuado de proteínas de origen animal y vegetal, como pollo, pescado, cerdo y legumbres, etc.”.
Ácidos grasos, probióticos e hidratación
“Son igualmente muy necesarios los ácidos grasos esenciales como semillas, aguacate y aceites vegetales, además de los famosos probióticos, o sea, alimentos fermentados. Y por supuesto, una buena hidratación”, añadió.
Vitaminas
“Si hay necesidad, también se puede suplementar la dieta con vitaminas del complejo B, vitamina D, zinc, magnesio y ashwagandha (planta recomendada para mejorar el sueño, el estrés y la ansiedad). Y evitar lo más que se pueda el consumo de ultraprocesados (lasañas, pizzas, cremas o sopas, nuggets, papas fritas, sandwiches, etc.)”.
Un tema de discusión entre mujeres que realizan dietas, es siempre el horario de la cena, y sobre ello, la profesional aclaró cuanto sigue: “Los ideal es cenar temprano, entre las 19:00 o 20:00, para que la melatonina (hormona del sueño) no se corte y pueda tener un sueño reparador”.
Ejercicios y actividades anti estrés
Finalmente, toda dieta debe ir siempre acompañada por actividades físicas. “Muy importante también a la par de la alimentación, realizar ejercicios de fuerza para trabajar la ganancia de masa muscular; además de la gestión del estrés mediante paseos al aire libre, baile, o alguna actividad que guste a la persona”, terminó asegurando la entrevistada.