La hidroterapia es un tratamiento terapéutico que utiliza el agua como medio para mejorar la movilidad del cuerpo ya sea en bebés, niños y adolescentes, y así brindar bienestar y salud a los mismos.
María Laura Ayala, fisioterapeuta con enfoque en niños, habló de la importancia de la hidroterapia en los más pequeños. “La hidroterapia pediátrica tiene muy buenos resultados, logra que el niño se mueva más, que esté motivado, que respire mejor, se mueva mejor y por ende, logre la mayor musculatura, mayor fuerza muscular, equilibrio, y todo, con desplazamientos ya sea flotando o caminando en el agua”.
“Los trastornos más comunes que ingresan a la hidroterapia en Paraguay son: las parálisis cerebrales que tienen trastornos del tono muscular, y enfermedades neuromusculares”, agregó la misma.
Cómo funciona la hidroterapia pediátrica
• El niño realiza movimientos en el agua, que no puede realizar fuera de la misma, ya que no hay acción de la gravedad esto aumenta la fuerza muscular y mejora la movilidad
• Se logra así una mejora en el desarrollo motriz
•Es un estímulo sensorial, ya que el agua, la composición de la misma, hace sensible al tacto, y todavía más si es a diferentes temperaturas
• Mejora las capacidades respiratorias
• Produce relajación en la muscula global por la flotabilidad sobre todo en agua tibia, y activación muscular si es agua fría.
• Reduce el dolor en caso de cirugías o afecciones crónicas
• Es motivante, ya que el niño puede desplazarse, moverse y jugar lo que da un beneficio psicológico significativo
• La presión hidrostática del agua mejora la circulación sanguínea
“La hidroterapia pediátrica tiene muy buenos resultados, logra que el niño se mueva más, que esté motivado, que respire mejor, se mueva mejor y por ende, logre la mayor musculatura, mayor fuerza muscular, equilibrio”
¿Qué tipo de niño puede realizar Hidroterapia?
La fisioterapia acuática está indicada para “todo niño o adolescente (entre 0 y 18 años) que curse una condición diagnosticada, como trastornos músculo esqueléticos, síndromes genéticos, Autismo, afecciones traumatológicas, reumáticas o neuromusculares”, comentó además la profesional.
La duración promedio de las sesiones es de unos 40 minutos, y el momento en que se empiece a ver los resultados dependerá del niño y de la patología que tenga. “El niño también pasa por un periodo de adaptación al medio acuático, un medio diferente. En algunos casos, al mes o al mes y medio ya se observan cambios. Idealmente, se deberían de realizar al menos dos sesiones semanales, siempre que las condiciones estén dadas”.
Condiciones que debe cumplir el niño para la hidroterapia
El niño debe reunir ciertas condiciones para ingresar al medio acuático como: no poseer afecciones respiratorias ni dérmicas, cuadros gripales ni alergias marcadas, tampoco heridas o alguna otra afección de la piel.
Condiciones del agua para hidroterapia
Las condiciones ideales en cuanto al agua para la realización de una buena fisioterapia son: que la piscina sea techada, que el agua esté a unos 34 grados, que exista un microclima, que sea un lugar acogedor y tranquilo, y que el agua tenga el tratamiento necesario para que sea cristalina y esté libre de gérmenes.