Elegir el protector solar correcto y adoptar hábitos saludables al exponerse a la radiación ultravioleta (UV) son claves para prevenir problemas como quemaduras, envejecimiento prematuro y enfermedades más graves como el cáncer de piel.
La dermatóloga Verónica Rotela, especialista del Hospital de Clínicas, destaca que cada persona debe seleccionar su protector solar en función de factores como el fototipo de piel, la edad, las actividades al aire libre y los antecedentes médicos. Según la experta, la personalización es esencial para que el producto sea efectivo y brinde la protección necesaria.
¿Por qué es importante cuidar la piel del sol?
Tomar sol en cantidades moderadas tiene beneficios importantes para la salud. La radiación solar estimula la producción de vitamina D, necesaria para la salud ósea y el sistema inmunológico. Además, mejora el estado de ánimo al aumentar la serotonina, conocida como la “hormona de la felicidad”.
Sin embargo, la exposición excesiva puede tener graves consecuencias. La Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte que la radiación UV puede causar daños como:
• Quemaduras solares: Lesiones inmediatas que dañan la epidermis y pueden dejar cicatrices.
• Daños en el ADN: Relacionados con un mayor riesgo de cáncer de piel.
• Reacciones fototóxicas o fotoalérgicas: Alergias provocadas por el contacto de la piel con el sol y ciertas sustancias.
• Daños oculares: Como fotoqueratitis (inflamación de la córnea), fotoconjuntivitis y cataratas.
• Envejecimiento prematuro: Aparición de manchas, arrugas y pérdida de elasticidad en la piel.
Cómo elegir el protector solar adecuado
El protector solar es una de las herramientas más importantes para prevenir los efectos negativos del sol. Sin embargo, no todos los productos son iguales, y su elección debe basarse en las características individuales.
1. Fototipo de piel: Este factor mide cómo reacciona la piel al sol. Las personas con fototipos bajos (piel muy clara, pelirrojos o rubios) necesitan mayor protección porque su piel tiene menos capacidad para adaptarse a la radiación UV. En Paraguay, la mayoría de la población presenta fototipos III, IV y V, que son más resistentes, pero aun así requieren protector solar.
2. Factor de protección solar (FPS): Según los expertos, el FPS mínimo recomendado es de 30, aunque el FPS 50 es ideal para una mayor cobertura. Este número indica el tiempo que una persona puede estar expuesta al sol sin quemarse en comparación con no usar protector.
3. Protección de amplio espectro: Es crucial que el protector bloquee tanto los rayos UVA, responsables del envejecimiento, como los UVB, que causan quemaduras y están relacionados con el cáncer de piel.
4. Textura y composición: Para pieles grasas o con tendencia al acné, se recomienda optar por protectores libres de aceite (oil-free) y con fórmulas ligeras. En cambio, las pieles secas se benefician de productos más hidratantes.
¿Cómo y cuándo aplicar el protector solar?
La Dra. Rotela sugiere aplicar el protector solar al menos 30 minutos antes de salir al aire libre, para que el producto se absorba correctamente. Además, es necesario reaplicarlo cada dos horas o después de actividades como nadar, sudar o secarse con una toalla. Incluso en días nublados, los rayos UV atraviesan las nubes, por lo que no se debe omitir su uso.
Medidas adicionales para protegerse del sol
Además del uso del protector solar, es importante adoptar otras prácticas para reducir el riesgo de daños por la radiación UV:
1. Evitar horarios de mayor intensidad solar: Entre las 10:00 y las 16:00 horas, los rayos solares son más intensos, por lo que se recomienda limitar la exposición directa durante este período.
2. Buscar sombra: Permanecer bajo sombrillas, árboles o refugios puede disminuir considerablemente el impacto de los rayos UV. Aun así, es esencial complementar con protector solar y ropa adecuada.
3. Vestimenta protectora: Usar camisas de manga larga, pantalones y faldas largas de tejidos tupidos y colores oscuros brinda mayor protección. Prendas certificadas con protección UV son una excelente opción.
4. Sombreros y lentes de sol: Los sombreros de ala ancha protegen áreas vulnerables como el rostro, orejas y cuello. En cuanto a los lentes de sol, se recomienda elegir modelos envolventes que bloqueen el 99-100% de los rayos UVA y UVB.
5. Hidratación y alimentación: Mantenerse hidratado es esencial para que la piel conserve su elasticidad. Además, consumir alimentos ricos en antioxidantes, como frutas y verduras, puede reforzar la protección natural de la piel contra los efectos nocivos del sol.
La importancia de la prevención
Proteger la piel del sol no solo es una cuestión estética, sino de salud a largo plazo. Adoptar estos hábitos y seleccionar el protector solar adecuado puede marcar la diferencia en la prevención de enfermedades graves. Profesionales recuerdan que cuidar tu piel hoy es invertir en tu bienestar futuro.