Marcial Gómez, de la Federación Nacional Campesina, habló con este medio y criticó al presidente Santiago Peña por no referirse a la situación de las tierras en Paraguay, concentradas en pocas manos, según afirmó.
Dijo que la clase campesina es víctima de persecución política y de criminalización de su lucha. Por ese motivo les despierta como menos preocupación que el presidente Peña no se haya pronunciado sobre la situación de los trabajadores del campo.
“La falta de una política de Estado para un tema que es principal, que genera conflicto social y que ataja cualquier posibilidad de desarrollo nacional que es la concentración de tierras en pocas manos. La problemática de la tierra en nuestro país es un problema principal que se debe darle salida con una política de reforma agraria y de eso nuevamente no se acordó el presidente”, dijo.
Gómez manifestó que el sector campesino sigue abandonado por el Estado con la falta de créditos, acompañamiento técnico ante los embates del cambio climático, la falta de mercado para sus productos.
“La pequeña agricultura está totalmente abandonada y de eso no se acordó el presidente. Además, el problema climático se viene agudizando y en el Paraguay no hay seguro agrícola para el pequeño productor”, fustigó.
Acusó que no hay inversión en el sector y que incluso se recortan fondos para el Ministerio de Agricultura.